Nos complace compartir esta edición con el mundo académico internacional. Resulta una novedad científica que desde la Universidad de Antioquia, Medellín, Colombia, se genere el diálogo y el acercamiento entre culturas lejanas y, hasta cierto punto, ignoradas o que se ignoran mutuamente por sus prejuicios epistémicos. La hiperespecialización del saber es una forma de establecer hegemonías sectoriales y de legitimar imposiciones disciplinares, amparadas en la convicción de que hay campos del saber más importantes que otros. Todavía se piensa que hay conocimientos útiles, en ciertas ciencias, e inútiles en el resto; todo depende del desarrollo de las economías. Aquí, por el contrario, estamos convencidas de nuestra pertenencia a varias territorialidades y temporalidades. Las lenguas, las artes y los viajes son nuestra memoria y de ella deviene nuestra alegría del encuentro con lo lejano y misterioso.
Quizá sea la primera vez, ojalá nos equivoquemos en el juicio, que la Revista Lingüística y Literatura acoje en su páginas investigaciones recientes sobre la literatura japonesa medieval. Por lo menos hoy nos atrevemos a publicar artículos científicos en esa lengua. De tal modo que la contribución de Kazuko Takagi, de la Universidad de Tokyo, sobre el Genji Monogatari, una obra clásica de la narrativa japonesa del siglo XI, es a todas luces una novedad científica que espera lectores entre los estudiantes del japonés. Y, como lo bueno y lo bello se celebran, acompañan esa novedad “El animismo poético de Sansei Yamao”, una aproximación biográfica y filosófica enviada desde Japón por el escritor mexicano Yaxkin Melchy, profesor de Universidad de Tsukuba. A su lado, aparece la entrevista “La poesía entre el pensar y el caminar” que nos concedió el poeta Keijiro Suga, celebrado y reconocido académico, traductor y místico, a quien conocimos en Osorno, Chile. Además nos cedió sus “Poemas del cuervo” en japonés escrito y oral y con una traducción al español de Javier Bozalongo. Cierra este homenaje a la literatura japonesa, la reseña “Textos teatrales del género kyôgen” del joven escritor Jaime Andrés Álvarez Cifuentes, quien se ocupa de presentar esta compilación de Don Kenny al público colombiano.
Las culturas africanas y afrodescendientes también se conectan a este recorrido por lo mundial y lo propio. Con su visita a la araña, ancestro presente en el cuento «Betsabelina Ananse Docordó», Paola Andrea Bejarano Alzate, de la Universidad del Valle, Colombia, nos recuerda las relaciones entre el Pacífico y el Caribe colombianos en la cuentística de la chocoana Amalia Lú Posso Figueroa. Esa conexión proviene de una araña nacida en Ganha que sabe resistir y divertirse en las literaturas de la diáspora. Desde Cuba, Yuricsel Soriano Delgado, de la Universidad de Sancti Spíritus, y Marta Emilia Cordiés Jackson, de la Universidad de Oriente, nos envían un aporte a los estudios de los relatos de los orichas de la cultura yorubá conservados y transformados en América. Uno de esos géneros narrativos es el patakí, de cuya importancia poco se suele mencionar. Otro de esos géneros, es el orìkí y Melany Castro Delgado, estudiante de Filología Hispánica, lo pone en diálogo, en su reseña, con la herencia espiritual yorubá presente en la poesía de la escritora cubana Georgina Herrera. Esa espiritualidad, en torno a la lucha y la defensa de la lengua local, el krioll, aparece en A Tall History of Sugar, novela de la jamaicana Forbes Crudella reseñada por Juan Esteban Ibarra Atehortúa, nuestro asistente editorial. Juan Carlos Vásquez García y Juan Fernando García Castro, ambos de la Universidad Pontificia Bolivariana, Medellín, Colombia, asumen el reto de leer los aportes del escritor y pensador keniata Ngugi wa Thiong’o en relación a la rebeldía, la dignidad y a la decolonización mental. De igual talante crítico es la obra de la escritora camerunesa Léonora Miano, quien visitó la Universidad de Antioquia en 2023 y habló de su ensayo L’opposé de la blancheur. Réflexions sur le problème blanc. La simpleza corrosiva de su palabra deja fuera de dudas que ni África ni lo afro ni lo negro existían hasta que el conquistador europeo a mediados del siglo XV los inventó a favor de su expansión económica.
Una reseña de la novela Piñén de la escritora mapuche Daniela Catrileo enviada por Mireya Alejandra Ramos Jiménez, de la Universidad de Concepción, llama la atención sobre la discriminación y el atropello que viven los antiguos dueños de esa parte del continente. En las periferias de Santiago viven los mapuches, relegados y estigmatizados por una sociedad cada vez más neoliberal. En contraste, Luis Javier González Toro, de la Universidad de Antioquia, legitima los saberes murui-muina en el análisis del poema «Animal que respira» de la argentina Olga Orozco. A partir del jágiiyi y el jiyaki, conceptos fundamentales de la espiritualidad en el bosque, se amplía la interpretación de la relación cuerpo/territorio/cosmos.
Otros rercoridos por lenguas amadas, el inglés, el portugués y el italiano, complementan el viaje por varios continentes. Las relaciones entre América y Europa se pueden ver en Wounded Water, poemario bilingüe, de la colombiana Anabel Torres leído por Guillermo Molina Morales del Instituto Caro y Cuervo. Autotraducirse y escribirse en otra lengua siempre será un motivo de reinvención. En otro viaje por Europa, Renata Rocha Ribeiro, Eduarda Cristina Lima y Thaís Alves de Sousa, trío de la Universidade Federal de Goiás, Brasil, hacen un estudio comparado entre las novelas La figlia oscura, de la italiana Elena Ferrante, y Mar azul, de la argentino-brasileña Paloma Vidal. En ambas novelas se traza una reconstrucción de la memoria a partir de las experiencias de la maternidad, el parentesco, el envejecimiento y la vejez.
Cerramos esta edición con cuatro testimonios, valiosos para el diagnóstico de nuestros espacios de formación desde la mirada de los egresados y las egresadas de los programas de Letras y Filología Hispánica. En el primero, Esnedy Aidé Zuluaga Hernández hace énfasis en la necesidad de fortalecer el estudio de la poesía como base fundamental para el desarrollo de las capacidades y virtudes de la filología. En el segundo, Álvaro Hernán Cruz Mejía rememora cómo la literatura fue un refugio en tiempos de incertidumbre. En el tercero y en el cuarto, Maira Fernanda Guzmán García y Juan Diego Buitrago Ortiz nos ilustran sobre los nuevos espacios laborales: el diseño conversacional y el User experience (UX). Esas formas de habitar hoy la filología nos invitan a reinventar los modos en que propiciamos la pasión por el conocimiento y las otras formas de lectura y escritura.