De cronotopos y crono-utopías notas para un museo en el no-tiempo y no-lugar

Resumen

En el contexto de la modernidad, la institución del museo, apoyada por los mecanismos de la restauración, la patrimonialización y la historia del arte, constituye una de las formas fundamentales de aparecer de las obras de arte, integradas al presente, en un proceso de selección y de descarte, que las hace inocuas. El museo ofrece una forma narrativa sin facetas inquietantes, a la que accede el público con actitudes premodernas, que pueden asociarse a las antiguas prácticas religiosas en la  búsqueda quemérica de un ennoblecimiento del espíritu. Frente a las vanguardias surgen fuerzas moderadoras como la crítica y la teoría estética, que permiten al museo inmortalizar algunos de sus productos mientras lanza los demás a una obsolescencia controlada por afanes mercantiles, porque no caben en su narrativa lineal, tecnológica e irreversible. La actitud se mueve en dimensiones multiespaciales y multitemporales donde el arte usa no sólo todos los medios técnicos, electrónicos, sino también los mercantiles.